La masturbación femenina es un tema cada vez más abierto y aceptado, tanto entre los hombres como en las mujeres. Sin embargo, aún existen muchas dudas y desinformación al respecto. Por eso, a continuación te presentamos todo lo que debes saber sobre la masturbación en la mujer.
La masturbación es muy importante para disfrutar de una buena sexualidad con tu pareja, ya que a través de la autosatisfacción, puedes conocer tu cuerpo y descubrir qué zonas son más erógenas para ti y de qué forma prefieres estimularlas. Así, estando conciente de lo que te genera más placer, puedes luego compartirlo con tu chico, quien podrá satisfacerte mucho mejor, tanto en los preliminares como durante el sexo.
Todas las mujeres tenemos distintas preferencias y zonas más erógenas que otras, sin embargo, el clítoris es un punto de excitación que todas compartimos sin excepción. El clítoris es la zona erógena por excelencia en la mujer, y por ende debemos dedicarle especial atención.
Pero esto no significa que entraremos de primeras a estimular el clítoris, sino que al contrario, esta zona es tan sensible que conviene comenzar estimulando otros puntos para después, con un mayor nivel de excitación, pasar al clítoris.
Una buena forma de comenzar la masturbación, es acariciando los pechos y los pezones, para luego bajar hacia el abdomen y la zona interior de los muslos. Desde aquí podemos continuar pasando los dedos suavemente por la vulva, incluyendo los labios internos y los externos. Si con esto ya has alcanzado un buen nivel de excitación, puedes empezar a acariciar el clítoris de la forma que más te plazca. Es recomendable que humedezcas tus dedos con tu misma lubricación, o bien con un lubricante artificial.
Para estimular el clítoris los movimientos circulares hechos con la yema de los dedos suelen ser los más placenteros. Realízalos ejerciendo una suave presión sobre la zona, para una sensación aún más intensa. El ritmo con que lo hagas dependerá de tu excitación, mientras más caliente te pongas, las caricias irán ganando más velocidad y presión, lo que finalmente te hará llegar al orgasmo.
La estimulación del clítoris puedes combinarla con penetraciones vaginales con tus mismos dedos. Si no estás lo suficientemente lubricada, debes ponerte un lubricante artificial. La mejor manera de hacerlo es con los dos dedos del medio, ya que con ellos puedes llegar más adentro, abarcando más puntos. Paralelamente, puedes presionar tu clítoris con la palma de tu mano, logrando una doble estimulación.
Otra opción, es la de incluir juguetes sexuales. Puedes encontrar para el clítoris, para la vagina e incluso para el ano. Los vibradores son una excelente opción, ya que casi no debes hacer ningún trabajo, sólo lo ubicas en la zona que quieres estimular, lo prendes y listo, solito se encarga de entregarte todo el placer.
Otra técnica de masturbación femenina, mucho menos conocida, es la indirecta. Ésta consta de apretar los muslos para contraer la pelvis. Aunque no lo creas, puede ocasionar un gran placer e incluso hacerte llegar al orgasmo.
Por último, un factor muy importante dentro de la masturbación es tu mente. Mientras te acaricias y estimulas las distintas partes de tu cuerpo, debes dirigir tu imaginación hacia tus mayores fantasías eróticas y soñar que las estás haciendo realidad. Este juego es el camino directo y seguro al orgasmo.
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